Este edificio, y, en especial las cuatro cariátides que tiene en su frente (de las cuales en la foto aparecen solo dos) tiene una anécdota muy divertida.
Resulta que cuando se lo construyó, las cuatro cariátides (hechas en mortero de cemento) estaban desnudas, exhibiendo unos hermosos senos que resultaron un poco ofensivos para la moral de la época.
Por ello, se las cubrió con unas muy discretas vestiduras hechas con mortero de cal, en el mismo estilo que las esculturas originales, ... y aquí no pasó nada (ni se notaba la diferencia).
Pero, a principios de la década de 1980, se hizo la limpieza del frente del edificio con hidrolavadoras de alta presión.
Sin darse cuenta, uno de los operarios ... DESVISTIO COMPLETAMENTE A UNA DE LA CARIATIDES !!!, dejando a la vista de todos su espléndido pecho.
Otro operario no alcanzó a remover el material de la cariátide que estaba limpiando (precisamente la que aparece a la derecha de la foto) y la dejó cubierta con una delgada capa de revoque que da la impresion de ser un sutil velo que deja percibir los pezones de la cariátide.
A partir de ese momento, la limpieza se continuó utilizando una técnica menos agresiva.
Así es que, hoy en día, en el frente del edificio se pueden apreciar dos cariátides completamente vestidas, una tercera cariátide con su torso completamente desnudo y una cuarta (la que aparece a la derecha de la foto) cubierta con un sutil velo.
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Este edificio, y, en especial las cuatro cariátides que tiene en su frente (de las cuales en la foto aparecen solo dos) tiene una anécdota muy divertida.
Resulta que cuando se lo construyó, las cuatro cariátides (hechas en mortero de cemento) estaban desnudas, exhibiendo unos hermosos senos que resultaron un poco ofensivos para la moral de la época.
Por ello, se las cubrió con unas muy discretas vestiduras hechas con mortero de cal, en el mismo estilo que las esculturas originales, ... y aquí no pasó nada (ni se notaba la diferencia).
Pero, a principios de la década de 1980, se hizo la limpieza del frente del edificio con hidrolavadoras de alta presión.
Sin darse cuenta, uno de los operarios ... DESVISTIO COMPLETAMENTE A UNA DE LA CARIATIDES !!!, dejando a la vista de todos su espléndido pecho.
Otro operario no alcanzó a remover el material de la cariátide que estaba limpiando (precisamente la que aparece a la derecha de la foto) y la dejó cubierta con una delgada capa de revoque que da la impresion de ser un sutil velo que deja percibir los pezones de la cariátide.
A partir de ese momento, la limpieza se continuó utilizando una técnica menos agresiva.
Así es que, hoy en día, en el frente del edificio se pueden apreciar dos cariátides completamente vestidas, una tercera cariátide con su torso completamente desnudo y una cuarta (la que aparece a la derecha de la foto) cubierta con un sutil velo.
Cosas que pasan.
kceav@hotmail.com
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